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POR MARCO BONILLA
Cada gobierno municipal se hace distinguir por diversos elementos, como son: la obra pública, la inversión en seguridad, el cauce de la agenda pública en temas de familia, la prevención en salud, programas de carácter humano y social que impactan en el diario vivir de niños y adolescentes, jóvenes, mujeres y hombres, y adultos mayores.
Es también elemento de recuerdo las academias a las que convocó para el fortalecimiento del cuerpo policial y de bomberos.
Una capital en desarrollo permanente, como es la nuestra, requiere de más capital humano para mantenerse a buen resguardo.
Hoy, el Heroico Cuerpo de Bomberos en nuestro municipio engrosa sus filas con la suma de 41 nuevos elementos, mujeres y hombres que han decidido formarse humana y técnicamente, para hacerle frente a los siniestros que, de aparecer, pondrían en riesgo la integridad de la familias de Chihuahua capital.
En nuestro municipio, como en México y el mundo, la figura del bombero representa uno de los máximos ejemplos de valentía, honor y servicio, vidas que se entregan al límite por asegurar la permanencia de otras vidas; ellas y ellos son testimonio fiel de la invitación a la que todos estamos llamados, el servicio a nuestro prójimo.
El alto porcentaje de niños que responden soñar con ser bomberos cuando adultos, confirma la heroicidad que envuelve a esta figura de honor; las infancias los reconocen como verdaderos héroes sin capa, como superhéroes de carne y hueso, que más allá de la ciencia ficción defienden la vida en la escena real de cada día.
De ello va que a todo cuerpo de bomberos en México se le antepusiera el calificativo de “heroico”, que lo es de facto, desde el momento en que una persona decide enlistarse en la academia, llevándola a término para que le sea impuesta su placa, como sucederá este mismo lunes a 6 mujeres y 35 hombres.
Ya lo versa el Himno del Bombero, que “mientras haya una esperanza de una vida que salvar, siempre listos (…) para la vida ofrendar”, y que en la opinión del que esto escribe, esta estrofa es la confirmación del más alto compromiso que una mujer y hombre bombero asumen frente al pueblo al que sirven, mismo al que le dicen: “ten presente amado pueblo, que si en servicio me fui, aunque no te conociera daría la vida por ti”.
Son justamente las familias de Chihuahua capital las primeras en reconocer la loable labor de nuestro Heroico Cuerpo de Bomberos, y son las familias quienes —parafraseando el Himno Nacional Mexicano—ponen sobre esta noble institución un laurel de victoria, y un recuerdo de honor a mujeres y hombres que, aquí o en cualquier rincón de la tierra, han perdido su vida en cumplimiento de su deber.
Hoy es un día de fiesta para Chihuahua capital, que desde la valentía de nuestros bomberos se confirma como la capital que da norte a México.
POR MARCO BONILLA
Cada gobierno municipal se hace distinguir por diversos elementos, como son: la obra pública, la inversión en seguridad, el cauce de la agenda pública en temas de familia, la prevención en salud, programas de carácter humano y social que impactan en el diario vivir de niños y adolescentes, jóvenes, mujeres y hombres, y adultos mayores.
Es también elemento de recuerdo las academias a las que convocó para el fortalecimiento del cuerpo policial y de bomberos.
Una capital en desarrollo permanente, como es la nuestra, requiere de más capital humano para mantenerse a buen resguardo.
Hoy, el Heroico Cuerpo de Bomberos en nuestro municipio engrosa sus filas con la suma de 41 nuevos elementos, mujeres y hombres que han decidido formarse humana y técnicamente, para hacerle frente a los siniestros que, de aparecer, pondrían en riesgo la integridad de la familias de Chihuahua capital.
En nuestro municipio, como en México y el mundo, la figura del bombero representa uno de los máximos ejemplos de valentía, honor y servicio, vidas que se entregan al límite por asegurar la permanencia de otras vidas; ellas y ellos son testimonio fiel de la invitación a la que todos estamos llamados, el servicio a nuestro prójimo.
El alto porcentaje de niños que responden soñar con ser bomberos cuando adultos, confirma la heroicidad que envuelve a esta figura de honor; las infancias los reconocen como verdaderos héroes sin capa, como superhéroes de carne y hueso, que más allá de la ciencia ficción defienden la vida en la escena real de cada día.
De ello va que a todo cuerpo de bomberos en México se le antepusiera el calificativo de “heroico”, que lo es de facto, desde el momento en que una persona decide enlistarse en la academia, llevándola a término para que le sea impuesta su placa, como sucederá este mismo lunes a 6 mujeres y 35 hombres.
Ya lo versa el Himno del Bombero, que “mientras haya una esperanza de una vida que salvar, siempre listos (…) para la vida ofrendar”, y que en la opinión del que esto escribe, esta estrofa es la confirmación del más alto compromiso que una mujer y hombre bombero asumen frente al pueblo al que sirven, mismo al que le dicen: “ten presente amado pueblo, que si en servicio me fui, aunque no te conociera daría la vida por ti”.
Son justamente las familias de Chihuahua capital las primeras en reconocer la loable labor de nuestro Heroico Cuerpo de Bomberos, y son las familias quienes —parafraseando el Himno Nacional Mexicano—ponen sobre esta noble institución un laurel de victoria, y un recuerdo de honor a mujeres y hombres que, aquí o en cualquier rincón de la tierra, han perdido su vida en cumplimiento de su deber.
Hoy es un día de fiesta para Chihuahua capital, que desde la valentía de nuestros bomberos se confirma como la capital que da norte a México.
Osvaldo
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