En México no se aplican filtros o se realizan censos que puedan cotejar con las autoridades de otros países y confirmar si alguno tiene antecedentes penales
Es muy complicado para las autoridades el identificar quienes están huyendo por antecedentes criminales de sus países de origen y que llegan a esta ciudad en las caravanas de migrantes, comentó Carlos Manuel Salas, fiscal de Distrito en la Zona Norte.
“Hay de todo, mire cuando se enteran gentes del El Salvador, de Nicaragua y de otros lugares, a veces aprovechan y vámonos, los sueltan y como no hay un control migratorio, no hay forma de estar, normalmente cuando tu llegas a México presentas un documento y antes de darte el permiso para entrar se checan tus antecedentes, lo que se hace en cualquier país, pero cuando irrumpes en grupos de ese tamaño de 500, mil, 3 mil, 4 mil gentes pues se filtra mucha gente pero yo quiero pensar que el 90% son gente que tienen deseos de mejorar su vida que es terrible en esas regiones”, mencionó Salas.
“El municipio ha trabajado muchísimo en ese tema, pero creo que todos debemos trabajar federación, estado, municipio, porque es un problema social, humano, de sobrevivencia y también a veces se genera violencia como en todos los seres humanos, existen buenos malos y regulares y a veces están gentes muy violentas en el grupo de personas que arriba a la ciudad por qué no se tiene un control definido cuando llega una ola de mil, dos mil, cuatro mil gentes sin ningún papel, sin ninguna identificación es complicado pero debe prevalecer la seguridad de ellos”, subrayó.
Lamentablemente en México no se aplican filtros o se realizan censos que puedan cotejar con las autoridades de otros países y confirmar si alguno tiene antecedentes penales o son buscados por algún tipo de delito.
“Siempre hay riesgos, pero no hay que generalizar hay mujeres, niños, gente muy honesta que viene con la ilusión de cómo llegamos aquí y a veces viene gente violenta que más que cruzar se integra a cometer actividades delictivas, que lo mismo hacían en su país”, resaltó
“Es complicado, realmente se han involucrado los carteles en ese nuevo negocio de migrantes como también se involucran en la trata de personas, en otro tipo de delitos muy redituables los grupos del crimen organizado que controlan esta son extremadamente violentos y realmente la gente improvisada que se quiere sumar a participar en el control y en la trafico de migrantes pues corren muchos riesgos, son muy violentas estas personas es mucho el dinero que está en juego pero fundamentalmente son células del crimen organizado los que medran y explotan”.
“Vamos a participar todos, me decían que casi 400 migrantes bajaron en Samalayuca, entonces nos ha estado rebasando estas circunstancias”, comentó el fiscal de Distrito en la Zona Norte.
“Pero si es un problema porque es una ciudad que está colapsada, aquí también hay pobreza, también hay mendicidad de compañeros juarenses, compañeros mexicanos que también necesitan asistencia de habitación, de comida, de atención es algo que debemos ver con más seriedad, más solidez y con mayores recursos”.
Es muy complicado para las autoridades el identificar quienes están huyendo por antecedentes criminales de sus países de origen y que llegan a esta ciudad en las caravanas de migrantes, comentó Carlos Manuel Salas, fiscal de Distrito en la Zona Norte.
“Hay de todo, mire cuando se enteran gentes del El Salvador, de Nicaragua y de otros lugares, a veces aprovechan y vámonos, los sueltan y como no hay un control migratorio, no hay forma de estar, normalmente cuando tu llegas a México presentas un documento y antes de darte el permiso para entrar se checan tus antecedentes, lo que se hace en cualquier país, pero cuando irrumpes en grupos de ese tamaño de 500, mil, 3 mil, 4 mil gentes pues se filtra mucha gente pero yo quiero pensar que el 90% son gente que tienen deseos de mejorar su vida que es terrible en esas regiones”, mencionó Salas.
“El municipio ha trabajado muchísimo en ese tema, pero creo que todos debemos trabajar federación, estado, municipio, porque es un problema social, humano, de sobrevivencia y también a veces se genera violencia como en todos los seres humanos, existen buenos malos y regulares y a veces están gentes muy violentas en el grupo de personas que arriba a la ciudad por qué no se tiene un control definido cuando llega una ola de mil, dos mil, cuatro mil gentes sin ningún papel, sin ninguna identificación es complicado pero debe prevalecer la seguridad de ellos”, subrayó.
Lamentablemente en México no se aplican filtros o se realizan censos que puedan cotejar con las autoridades de otros países y confirmar si alguno tiene antecedentes penales o son buscados por algún tipo de delito.
“Siempre hay riesgos, pero no hay que generalizar hay mujeres, niños, gente muy honesta que viene con la ilusión de cómo llegamos aquí y a veces viene gente violenta que más que cruzar se integra a cometer actividades delictivas, que lo mismo hacían en su país”, resaltó
“Es complicado, realmente se han involucrado los carteles en ese nuevo negocio de migrantes como también se involucran en la trata de personas, en otro tipo de delitos muy redituables los grupos del crimen organizado que controlan esta son extremadamente violentos y realmente la gente improvisada que se quiere sumar a participar en el control y en la trafico de migrantes pues corren muchos riesgos, son muy violentas estas personas es mucho el dinero que está en juego pero fundamentalmente son células del crimen organizado los que medran y explotan”.
“Vamos a participar todos, me decían que casi 400 migrantes bajaron en Samalayuca, entonces nos ha estado rebasando estas circunstancias”, comentó el fiscal de Distrito en la Zona Norte.
“Pero si es un problema porque es una ciudad que está colapsada, aquí también hay pobreza, también hay mendicidad de compañeros juarenses, compañeros mexicanos que también necesitan asistencia de habitación, de comida, de atención es algo que debemos ver con más seriedad, más solidez y con mayores recursos”.
