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Una avalancha de inmigrantes ha provocado una seria crisis no sólo en las fronteras, sino a lo largo del territorio nacional.
Multitudes de extranjeros intentan entrar a Estados Unidos lo que ha provocado el cierre de dos puentes internacionales, uno en Ciudad Juárez y otro en Piedras Negras.
Las pérdidas millonarias ocasionadas por estas medidas estadounidenses obligaron a que funcionarios federales y estatales se reunieran en Ciudad Juárez.
El titular de Migración nacional apareció en público tras mantenerse alejado de los reflectores después del incendio en una estación migratoria en esta frontera que causó la muerte de 40 inmigrantes.
Una de las medidas que se acordaron con las autoridades norteamericanas fue la contención del paso de los indocumentados para evitar que lleguen a la frontera norte.
En Aguascalientes se realizó un operativo para bajar a los inmigrantes del tren, lo cual al parecer llevarán a cabo en otros sitios donde éstos abordan los vagones de carga.
Ferromex suspendió por unos días cuarenta viajes de sus ferrocarriles que se dirigían a la frontera norte.
La justificación de este paro fue la seguridad de los indocumentados que se apiñaban hasta en el techo de los vagones y sufrían frecuentes accidentes.
La realidad es que la cantidad de inmigrantes que utilizan este medio de transporte está causando un gran congestionamiento en los andenes y operaciones de los ferrocarriles.
Los días que estuvieron detenidos los trenes tuvo como resultado que aumentaran los extranjeros varados en varias poblaciones del país.
En Tapachula más de mil migrantes se amotinaron pues no les otorgaban el permiso temporal para viajar por México.
En la frontera norte arriban 8 mil inmigrantes por día, según declaró la secretaria de Relaciones Exteriores, una afluencia histórica que prendió la alarma en el gobierno mexicano y en el estadounidense.
Si el año pasado las autoridades migratorias estadounidenses detuvieron a 2.
3 millones de indocumentados en la frontera norte, en este año al parecer aumentará esta cifra pues ya son 2.
2 millones los extranjeros aprehendidos y fichados.
La política migratoria norteamericana se ha endurecido ante las oleadas crecientes de inmigrantes que huyen de sus países para lograr el anhelado “sueño americano”.
El problema para los mexicanos es que la mayoría de los migrantes que son rechazados los regresan a México pues algunos países no los reciben de nuevo como Venezuela, Cuba y Nicaragua.
Estos estados fallidos han causado la emigración de millones de ciudadanos, como Venezuela que ha perdido a la cuarta parte de su población.
El paraíso prometido por sus dictadores no llega ni llegará para millones de habitantes que prefieren arriesgar su vida que continuar padeciendo condiciones inhumanas que los mantienen en la miseria.
El problema migratorio en lugar de disminuir continuará creciendo ya que mientras prevalezcan el subdesarrollo y la falta de oportunidades en los países originarios seguirán emigrando sus ciudadanos.
En su transitar por varios países los inmigrantes son maltratados, vejados y robados no sólo por los delincuentes, sino también por los agentes de seguridad pública.
El viacrucis de los migrantes en el mundo no cesará mientras los gobiernos continúen tratando de aplicar medidas sólo para intentar menguarlo temporalmente mientras la crisis se agudiza día tras día afectando tanto a los extranjeros como a los nacionales.
Una avalancha de inmigrantes ha provocado una seria crisis no sólo en las fronteras, sino a lo largo del territorio nacional.
Multitudes de extranjeros intentan entrar a Estados Unidos lo que ha provocado el cierre de dos puentes internacionales, uno en Ciudad Juárez y otro en Piedras Negras.
Las pérdidas millonarias ocasionadas por estas medidas estadounidenses obligaron a que funcionarios federales y estatales se reunieran en Ciudad Juárez.
El titular de Migración nacional apareció en público tras mantenerse alejado de los reflectores después del incendio en una estación migratoria en esta frontera que causó la muerte de 40 inmigrantes.
Una de las medidas que se acordaron con las autoridades norteamericanas fue la contención del paso de los indocumentados para evitar que lleguen a la frontera norte.
En Aguascalientes se realizó un operativo para bajar a los inmigrantes del tren, lo cual al parecer llevarán a cabo en otros sitios donde éstos abordan los vagones de carga.
Ferromex suspendió por unos días cuarenta viajes de sus ferrocarriles que se dirigían a la frontera norte.
La justificación de este paro fue la seguridad de los indocumentados que se apiñaban hasta en el techo de los vagones y sufrían frecuentes accidentes.
La realidad es que la cantidad de inmigrantes que utilizan este medio de transporte está causando un gran congestionamiento en los andenes y operaciones de los ferrocarriles.
Los días que estuvieron detenidos los trenes tuvo como resultado que aumentaran los extranjeros varados en varias poblaciones del país.
En Tapachula más de mil migrantes se amotinaron pues no les otorgaban el permiso temporal para viajar por México.
En la frontera norte arriban 8 mil inmigrantes por día, según declaró la secretaria de Relaciones Exteriores, una afluencia histórica que prendió la alarma en el gobierno mexicano y en el estadounidense.
Si el año pasado las autoridades migratorias estadounidenses detuvieron a 2.
3 millones de indocumentados en la frontera norte, en este año al parecer aumentará esta cifra pues ya son 2.
2 millones los extranjeros aprehendidos y fichados.
La política migratoria norteamericana se ha endurecido ante las oleadas crecientes de inmigrantes que huyen de sus países para lograr el anhelado “sueño americano”.
El problema para los mexicanos es que la mayoría de los migrantes que son rechazados los regresan a México pues algunos países no los reciben de nuevo como Venezuela, Cuba y Nicaragua.
Estos estados fallidos han causado la emigración de millones de ciudadanos, como Venezuela que ha perdido a la cuarta parte de su población.
El paraíso prometido por sus dictadores no llega ni llegará para millones de habitantes que prefieren arriesgar su vida que continuar padeciendo condiciones inhumanas que los mantienen en la miseria.
El problema migratorio en lugar de disminuir continuará creciendo ya que mientras prevalezcan el subdesarrollo y la falta de oportunidades en los países originarios seguirán emigrando sus ciudadanos.
En su transitar por varios países los inmigrantes son maltratados, vejados y robados no sólo por los delincuentes, sino también por los agentes de seguridad pública.
El viacrucis de los migrantes en el mundo no cesará mientras los gobiernos continúen tratando de aplicar medidas sólo para intentar menguarlo temporalmente mientras la crisis se agudiza día tras día afectando tanto a los extranjeros como a los nacionales.
Osvaldo
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