Odín Dupeyrón reedita Y colorín colorado este cuento aún no se ha acabado, que publicó para superar una etapa de desempleo
Para Odín Dupeyrón, después de la pandemia apareció el miedo a la vejez; “pero una vejez cabrona y que sea dependiente de alguien, es mi mayor temor, cuando soy mi propio jefe en mis obras teatrales, en mi empresa, como director de escena tengo esa libertad de decisión y no deseo experimentar una ayuda en mi vejez”, declaró a los medios de comunicación.
La segunda preocupación de que es seguro que coincide con los 128 mil 9 millones de mexicanos en el territorio, es con “¡el dinero!”, reconoció.
“Como si lo volviera a vivir, igual que hace 20 años, después de la pandemia me quedé sin trabajo.
Nos va muy mal, afortunadamente ahorré dinero, pero se me fue en estos casi tres años.
Y ahora con el libro en su relanzamiento, espero que me vaya bien.
“Lo único es que aprendí a valorar el dinero, porque cuando me decían, ‘¿extrañas el teatro?’, decía no, tampoco al público, pude vivir sin él y el salir a la calle, tampoco lo extrañe, no soy de fiestas, soy casero y veo contenido de Netflix, tengo amigos y juego cartas.
“Entonces, ¿qué extrañé? ¡El dinero!, eso sí lo extraño mucho, mucho.
En este marco histórico está el dinero.
Antes era la sal, antes las vacas, antes era un cordero; ahora es el dinero y no es porque lo ame, sino porque es necesario tenerlo.
“Eso es lo que ha cambiado en mí.
No es que antes no me interesara, pero ahora entendí realmente el valor del dinero.
En mi caso, vivo lejos de lujos, no gasto en siete coches, casas, joyas o me lo tomo todo, no.
No soy una persona que gaste ostentosamente.
Sí tengo coche y casa bonitos, pero no tengo excesos.
Y saben que algo que no te dicen de por qué hay que ahorrar dinero, es porque el dinero te compra libertad de acción”, manifestó el autor de las obras Recalculando, Veintidós veintidós, ¡A vivir!, y Lucas, quien informó que está escribiendo una nueva pieza teatral, un libro de cartas de amor y la segunda parte de su primer libro.
Para Odín Dupeyrón, después de la pandemia apareció el miedo a la vejez; “pero una vejez cabrona y que sea dependiente de alguien, es mi mayor temor, cuando soy mi propio jefe en mis obras teatrales, en mi empresa, como director de escena tengo esa libertad de decisión y no deseo experimentar una ayuda en mi vejez”, declaró a los medios de comunicación.
La segunda preocupación de que es seguro que coincide con los 128 mil 9 millones de mexicanos en el territorio, es con “¡el dinero!”, reconoció.
“Como si lo volviera a vivir, igual que hace 20 años, después de la pandemia me quedé sin trabajo.
Nos va muy mal, afortunadamente ahorré dinero, pero se me fue en estos casi tres años.
Y ahora con el libro en su relanzamiento, espero que me vaya bien.
“Lo único es que aprendí a valorar el dinero, porque cuando me decían, ‘¿extrañas el teatro?’, decía no, tampoco al público, pude vivir sin él y el salir a la calle, tampoco lo extrañe, no soy de fiestas, soy casero y veo contenido de Netflix, tengo amigos y juego cartas.
“Entonces, ¿qué extrañé? ¡El dinero!, eso sí lo extraño mucho, mucho.
En este marco histórico está el dinero.
Antes era la sal, antes las vacas, antes era un cordero; ahora es el dinero y no es porque lo ame, sino porque es necesario tenerlo.
“Eso es lo que ha cambiado en mí.
No es que antes no me interesara, pero ahora entendí realmente el valor del dinero.
En mi caso, vivo lejos de lujos, no gasto en siete coches, casas, joyas o me lo tomo todo, no.
No soy una persona que gaste ostentosamente.
Sí tengo coche y casa bonitos, pero no tengo excesos.
Y saben que algo que no te dicen de por qué hay que ahorrar dinero, es porque el dinero te compra libertad de acción”, manifestó el autor de las obras Recalculando, Veintidós veintidós, ¡A vivir!, y Lucas, quien informó que está escribiendo una nueva pieza teatral, un libro de cartas de amor y la segunda parte de su primer libro.