Actualmente cuentan con alrededor de 70 especies diferentes y más de mil 500 ejemplares de fauna doméstica y silvestre
El domingo 11 de junio, el zoológico Las Moras, ubicado en Granjas Campestres del Bosque en Juan Aldama, Chihuahua, celebró el nacimiento de un adorable canguro.
Este acontecimiento representa un hito significativo para el dueño del zoológico y parque acuático "Tío Albert", del empresario Alberto Hernández Ramírez.
El nacimiento del canguro es un hecho sin precedentes en las instalaciones del zoológico desde su apertura.
Hernández Ramírez expresó su entusiasmo ante este acontecimiento y manifestó su esperanza de que el pequeño canguro pueda prosperar en el entorno donde cientos de ejemplares comparten y disfrutan de las visitas de los asistentes.
El zoológico Las Moras es hogar de alrededor de 70 especies diferentes, albergando aproximadamente mil 500 ejemplares de animales de fauna silvestre, también conocidos como autóctonos o nativos.
Estas especies son aquellas que se encuentran en su estado natural, independientes de la influencia humana.
Además, el zoológico también acoge especies domésticas, las cuales han sido moldeadas por la evolución y la intervención humana para satisfacer diversas necesidades.
La preservación y protección de estas especies es una prioridad para el zoológico Las Moras.
Su labor se centra en brindar un ambiente adecuado para el desarrollo y bienestar de los animales, así como en educar a los visitantes sobre la importancia de la conservación de la vida silvestre y la diversidad biológica.
El nacimiento del canguro es un logro destacado para el zoológico, ya que demuestra el éxito de sus esfuerzos de cuidado y reproducción de especies en cautiverio.
Este acontecimiento no solo trae alegría a los encargados del zoológico, sino que también representa una oportunidad para sensibilizar a la comunidad sobre la importancia de preservar y proteger a estas criaturas maravillosas.
Con la llegada de este nuevo miembro de la familia de canguros en Las Moras, se espera que los visitantes del zoológico puedan disfrutar de su compañía y aprender más sobre estas fascinantes criaturas australianas.
El zoológico continuará trabajando arduamente para garantizar el bienestar de todos sus habitantes y seguir promoviendo la conservación de la fauna silvestre, invitando a la comunidad a unirse a esta causa noble.
Muchas de las variedades de animales que tiene el señor Alberto, son no comercializables por peligro de extinción como los primates y la guacamaya (ave tropical).
La mayoría se encuentran en este peligro por la consumación de sus hábitats naturales, se habla de un 20% de la que existía hace 30 años.
El Zzoológico abrió sus puertas gracias a que Alberto recibió una pareja de pavos reales en 1980, después de adquirir a los animales que resultaban excedentes para otros establecimientos y con recursos privados, en la actualidad no tiene apoyos gubernamentales de ningún tipo, sin embargo es equiparable a la mayoría de los zoológicos que operan en el país.
El señor Alberto decide ajustarse al clima mexicano al momento de conseguir y aceptar diferentes especies, empezando por tener en exhibición especialmente a fauna endémica y después con aquellos que se adaptan más rápido al clima extremo de Chihuahua como lo son los felinos; pumas, tigres de bengala y leones.
El apoyo con el que cuentan estas instalaciones se basa en la tarifa que paga el visitante.
La entra cuesta 70 pesos mexicanos.
Tienen varios paquetes especiales como el paquete escolar de lunes a viernes con un mínimo de 50 personas, por el mismo precio de 70 pesos por visitante, lo que incluye en el paquete la entrada, explicación didáctica, guía y paseo en el tren.
Al año, este establecimiento recibe un poco más de mil personas, por lo mismo, durante la pandemia se complicó mucho la mantención, cuidado y alimentación de los animales.
Se tuvo que vender material que no se requería y se redujo la plantilla laboral al 30%, se tuvo que hacer ajustes para lograr pasar por esos dos años de confinamiento, aunque fue duro, Alberto se mantuvo positivo.
El tío Albert nos cuenta que no ve esta labor como su trabajo, sino como un hobbie e invita a las personas que como el hizo, trabajan tras un escritorio, a disfrutar de los que les gusta sin importar lo difícil que puede llegar a hacer, pues mientras ames tu labor, jamás será un trabajo.
Por último, invita a la comunidad chihuahuense a visitar su zoológico, pues dice que para que una ciudad prospere socialmente se requiere de parques de diversiones, cines, plazas comerciales y, por supuesto, de un zoológico.
El domingo 11 de junio, el zoológico Las Moras, ubicado en Granjas Campestres del Bosque en Juan Aldama, Chihuahua, celebró el nacimiento de un adorable canguro.
Este acontecimiento representa un hito significativo para el dueño del zoológico y parque acuático "Tío Albert", del empresario Alberto Hernández Ramírez.
El nacimiento del canguro es un hecho sin precedentes en las instalaciones del zoológico desde su apertura.
Hernández Ramírez expresó su entusiasmo ante este acontecimiento y manifestó su esperanza de que el pequeño canguro pueda prosperar en el entorno donde cientos de ejemplares comparten y disfrutan de las visitas de los asistentes.
El zoológico Las Moras es hogar de alrededor de 70 especies diferentes, albergando aproximadamente mil 500 ejemplares de animales de fauna silvestre, también conocidos como autóctonos o nativos.
Estas especies son aquellas que se encuentran en su estado natural, independientes de la influencia humana.
Además, el zoológico también acoge especies domésticas, las cuales han sido moldeadas por la evolución y la intervención humana para satisfacer diversas necesidades.
La preservación y protección de estas especies es una prioridad para el zoológico Las Moras.
Su labor se centra en brindar un ambiente adecuado para el desarrollo y bienestar de los animales, así como en educar a los visitantes sobre la importancia de la conservación de la vida silvestre y la diversidad biológica.
El nacimiento del canguro es un logro destacado para el zoológico, ya que demuestra el éxito de sus esfuerzos de cuidado y reproducción de especies en cautiverio.
Este acontecimiento no solo trae alegría a los encargados del zoológico, sino que también representa una oportunidad para sensibilizar a la comunidad sobre la importancia de preservar y proteger a estas criaturas maravillosas.
Con la llegada de este nuevo miembro de la familia de canguros en Las Moras, se espera que los visitantes del zoológico puedan disfrutar de su compañía y aprender más sobre estas fascinantes criaturas australianas.
El zoológico continuará trabajando arduamente para garantizar el bienestar de todos sus habitantes y seguir promoviendo la conservación de la fauna silvestre, invitando a la comunidad a unirse a esta causa noble.
Muchas de las variedades de animales que tiene el señor Alberto, son no comercializables por peligro de extinción como los primates y la guacamaya (ave tropical).
La mayoría se encuentran en este peligro por la consumación de sus hábitats naturales, se habla de un 20% de la que existía hace 30 años.
El Zzoológico abrió sus puertas gracias a que Alberto recibió una pareja de pavos reales en 1980, después de adquirir a los animales que resultaban excedentes para otros establecimientos y con recursos privados, en la actualidad no tiene apoyos gubernamentales de ningún tipo, sin embargo es equiparable a la mayoría de los zoológicos que operan en el país.
El señor Alberto decide ajustarse al clima mexicano al momento de conseguir y aceptar diferentes especies, empezando por tener en exhibición especialmente a fauna endémica y después con aquellos que se adaptan más rápido al clima extremo de Chihuahua como lo son los felinos; pumas, tigres de bengala y leones.
El apoyo con el que cuentan estas instalaciones se basa en la tarifa que paga el visitante.
La entra cuesta 70 pesos mexicanos.
Tienen varios paquetes especiales como el paquete escolar de lunes a viernes con un mínimo de 50 personas, por el mismo precio de 70 pesos por visitante, lo que incluye en el paquete la entrada, explicación didáctica, guía y paseo en el tren.
Al año, este establecimiento recibe un poco más de mil personas, por lo mismo, durante la pandemia se complicó mucho la mantención, cuidado y alimentación de los animales.
Se tuvo que vender material que no se requería y se redujo la plantilla laboral al 30%, se tuvo que hacer ajustes para lograr pasar por esos dos años de confinamiento, aunque fue duro, Alberto se mantuvo positivo.
El tío Albert nos cuenta que no ve esta labor como su trabajo, sino como un hobbie e invita a las personas que como el hizo, trabajan tras un escritorio, a disfrutar de los que les gusta sin importar lo difícil que puede llegar a hacer, pues mientras ames tu labor, jamás será un trabajo.
Por último, invita a la comunidad chihuahuense a visitar su zoológico, pues dice que para que una ciudad prospere socialmente se requiere de parques de diversiones, cines, plazas comerciales y, por supuesto, de un zoológico.
