Baja California, Tamaulipas y Chihuahua son las tres entidades con menos colaboradores en el ámbito formal con sueldos precarios
En Chihuahua, 295 mil 710 trabajadores formales (30%) carecen de salario suficiente que les permita salir de la pobreza, lo que posicionó a la entidad en el tercer lugar nacional con menor indecencia de en este sentido, según el estudio “La precariedad invade la formalidad” elaborado por Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, con datos a diciembre de 2022.
Baja California con el 24.
3% y Tamaulipas con el 29.
9 por ciento de colocadores formales con salario precario, ocuparon el primero y segundo sitio, respectivamente.
Por el contrario, en ocho estados de México, el salario insuficiente afecta a más del 55% de los trabajadores formales: se trata de Sinaloa, donde afecta al 62.
6%; Guerrero, al 61.
7%; Oaxaca, 60.
9; Durango, 58.
5; Chiapas, 56.
6; Tlaxcala y Michoacán al 56.
2% y Nayarit, al 55.
3.
Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, resaltó que el hecho de que millones de mexicanos cuenten con un empleo formal no es garantía de que puedan superar su condición de pobreza.
De acuerdo con registros del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) al cierre del año pasado, casi la mitad, 45% de las personas con empleo formal en nuestro país, carecen de salario suficiente que les permita dejar de ser pobres: se trata de 9 millones 598 mil personas, a quienes el salario mensual no les alcanza para comprar dos canastas básicas.
Resalta que al 53 por ciento de esas casi 10 millones de personas son trabajadores y trabajadoras de medianas y grandes empresas, ya sea en fábricas, almacenes, tiendas departamentales, corporativos o consorcios, acorde al estudio.
En este sentido, se evidenció que la pobreza y precariedad laboral no se asocian únicamente con la informalidad o el subempleo, también invade en gran medida la economía formal.
“Las empresas con mayor soporte económico también son fábricas de pobreza”.
El coordinador de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, Rogelio Gómez Hermosillo, refirió que es común pensar que el empleo formal garantiza superar la pobreza; sin embargo, es preciso desmitificar esta percepción errónea.
Un salario suficiente para comprar dos canastas básicas, explicó, es el umbral mínimo indispensable de ingreso familiar.
Es sólo un primer paso para contribuir a que una familia comience a superar su condición de pobreza.
Y de ahí la propuesta a los organismos empresariales de garantizar salario suficiente ya ($8,600 al mes).
Y luego avanzar hasta lograr “ingreso digno” (que puede ser de más de 10 mil pesos al mes).
En Chihuahua, 295 mil 710 trabajadores formales (30%) carecen de salario suficiente que les permita salir de la pobreza, lo que posicionó a la entidad en el tercer lugar nacional con menor indecencia de en este sentido, según el estudio “La precariedad invade la formalidad” elaborado por Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, con datos a diciembre de 2022.
Baja California con el 24.
3% y Tamaulipas con el 29.
9 por ciento de colocadores formales con salario precario, ocuparon el primero y segundo sitio, respectivamente.
Por el contrario, en ocho estados de México, el salario insuficiente afecta a más del 55% de los trabajadores formales: se trata de Sinaloa, donde afecta al 62.
6%; Guerrero, al 61.
7%; Oaxaca, 60.
9; Durango, 58.
5; Chiapas, 56.
6; Tlaxcala y Michoacán al 56.
2% y Nayarit, al 55.
3.
Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, resaltó que el hecho de que millones de mexicanos cuenten con un empleo formal no es garantía de que puedan superar su condición de pobreza.
De acuerdo con registros del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) al cierre del año pasado, casi la mitad, 45% de las personas con empleo formal en nuestro país, carecen de salario suficiente que les permita dejar de ser pobres: se trata de 9 millones 598 mil personas, a quienes el salario mensual no les alcanza para comprar dos canastas básicas.
Resalta que al 53 por ciento de esas casi 10 millones de personas son trabajadores y trabajadoras de medianas y grandes empresas, ya sea en fábricas, almacenes, tiendas departamentales, corporativos o consorcios, acorde al estudio.
En este sentido, se evidenció que la pobreza y precariedad laboral no se asocian únicamente con la informalidad o el subempleo, también invade en gran medida la economía formal.
“Las empresas con mayor soporte económico también son fábricas de pobreza”.
El coordinador de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, Rogelio Gómez Hermosillo, refirió que es común pensar que el empleo formal garantiza superar la pobreza; sin embargo, es preciso desmitificar esta percepción errónea.
Un salario suficiente para comprar dos canastas básicas, explicó, es el umbral mínimo indispensable de ingreso familiar.
Es sólo un primer paso para contribuir a que una familia comience a superar su condición de pobreza.
Y de ahí la propuesta a los organismos empresariales de garantizar salario suficiente ya ($8,600 al mes).
Y luego avanzar hasta lograr “ingreso digno” (que puede ser de más de 10 mil pesos al mes).
