El Centro Hípico Maturana es un lugar sumamente reconocido en la región sur de Chihuahua, pues se reúnen amantes de los caballos durante los fines de semana
Enclavado en las suaves colinas y paisajes ondulantes del sur de Chihuahua, el Centro Hípico Maturana emerge como un lugar de cultura ecuestre en la pintoresca localidad de Maturana.
Este centro, cuyo nombre evoca imágenes de caballos majestuosos y emocionantes carreras, no solo es un lugar de entretenimiento, sino un símbolo arraigado en la identidad y el espíritu de la región.
Sin embargo, el pasado fin de semana se vio envuelto en la tragedia, pues Marisela Barrón, dueña del lugar, fue asesinada junto con su esposo y dos de sus hijos.
Desde su creación, el Centro Hípico Maturana ha sido mucho más que un simple lugar de carreras de caballos.
Es un punto de encuentro para los amantes de los equinos, un escenario para la celebración de la tradición y un refugio para aquellos que buscan una conexión más profunda con la naturaleza y la comunidad.
Aquí, las familias se reúnen para disfrutar de emocionantes eventos ecuestres, desde apasionantes carreras hasta exhibiciones de habilidades y destrezas.
Cada año, Maturana se convierte en el punto de partida para la Cabalgata Villista un día antes del evento principal, un momento que rinde homenaje al legado del revolucionario Francisco Villa y marca el clímax de las Jornadas Villistas en la ciudad de Parral.
Antes de que los jinetes emprendan su viaje hacia Parral, convergen en Maturana para prepararse y compartir camaradería en anticipación a la histórica travesía.
Este encuentro anual no solo celebra la valentía y el espíritu indomable de Villa, sino que también sirve como un recordatorio vívido de la importancia de la unidad y la resistencia en tiempos de adversidad.
Además de las carreras, el Centro Hípico Maturana ofrece un espacio versátil para eventos y celebraciones en su encantadora "Quinta Don Alejo".
Con capacidad para albergar hasta 100 personas, esta quinta está equipada con todas las comodidades necesarias para organizar eventos familiares inolvidables, desde bodas y cumpleaños hasta reuniones sociales y quinceañeras.
Ubicado a solo 12 kilómetros de la mancha urbana de Parral, a lo largo de la Vía Corta a Chihuahua, el Centro Hípico Maturana se destaca como un refugio tranquilo y acogedor para quienes buscan escapar del ajetreo diario.
Aquí, los visitantes pueden disfrutar de emocionantes carreras de caballos, sentir la emoción palpable mientras los corceles galopan por el carril en competencia por la victoria.
Sin embargo, la reciente tragedia ha ensombrecido este idílico paisaje.
El pasado domingo 5 de mayo, la noticia de un violento ataque conmocionó a la región sur de Chihuahua.
Marisela Barrón, propietaria del Centro Hípico Maturana, junto con su esposo Kevin Hernández, un talentoso cantante de la agrupación H Norteña, y dos de sus hijos, fueron brutalmente asesinados en un acto, hasta ahora, sin sentido, mientras regresaban a casa después de un día de carreras de caballos.
Este acto atroz ha dejado un profundo impacto en la comunidad.
A pesar de esta tragedia, el Centro Hípico Maturana permanece como un símbolo de la pasión y el espíritu comunitario que define a esta región.
Mientras la comunidad se une para honrar la memoria de aquellos que se perdieron, el legado de Marisela Barrón y su familia perdurará en cada carrera de caballos y evento familiar que se llevará a cabo en este lugar querido.
Enclavado en las suaves colinas y paisajes ondulantes del sur de Chihuahua, el Centro Hípico Maturana emerge como un lugar de cultura ecuestre en la pintoresca localidad de Maturana.
Este centro, cuyo nombre evoca imágenes de caballos majestuosos y emocionantes carreras, no solo es un lugar de entretenimiento, sino un símbolo arraigado en la identidad y el espíritu de la región.
Sin embargo, el pasado fin de semana se vio envuelto en la tragedia, pues Marisela Barrón, dueña del lugar, fue asesinada junto con su esposo y dos de sus hijos.
Desde su creación, el Centro Hípico Maturana ha sido mucho más que un simple lugar de carreras de caballos.
Es un punto de encuentro para los amantes de los equinos, un escenario para la celebración de la tradición y un refugio para aquellos que buscan una conexión más profunda con la naturaleza y la comunidad.
Aquí, las familias se reúnen para disfrutar de emocionantes eventos ecuestres, desde apasionantes carreras hasta exhibiciones de habilidades y destrezas.
Cada año, Maturana se convierte en el punto de partida para la Cabalgata Villista un día antes del evento principal, un momento que rinde homenaje al legado del revolucionario Francisco Villa y marca el clímax de las Jornadas Villistas en la ciudad de Parral.
Antes de que los jinetes emprendan su viaje hacia Parral, convergen en Maturana para prepararse y compartir camaradería en anticipación a la histórica travesía.
Este encuentro anual no solo celebra la valentía y el espíritu indomable de Villa, sino que también sirve como un recordatorio vívido de la importancia de la unidad y la resistencia en tiempos de adversidad.
Además de las carreras, el Centro Hípico Maturana ofrece un espacio versátil para eventos y celebraciones en su encantadora "Quinta Don Alejo".
Con capacidad para albergar hasta 100 personas, esta quinta está equipada con todas las comodidades necesarias para organizar eventos familiares inolvidables, desde bodas y cumpleaños hasta reuniones sociales y quinceañeras.
Ubicado a solo 12 kilómetros de la mancha urbana de Parral, a lo largo de la Vía Corta a Chihuahua, el Centro Hípico Maturana se destaca como un refugio tranquilo y acogedor para quienes buscan escapar del ajetreo diario.
Aquí, los visitantes pueden disfrutar de emocionantes carreras de caballos, sentir la emoción palpable mientras los corceles galopan por el carril en competencia por la victoria.
Sin embargo, la reciente tragedia ha ensombrecido este idílico paisaje.
El pasado domingo 5 de mayo, la noticia de un violento ataque conmocionó a la región sur de Chihuahua.
Marisela Barrón, propietaria del Centro Hípico Maturana, junto con su esposo Kevin Hernández, un talentoso cantante de la agrupación H Norteña, y dos de sus hijos, fueron brutalmente asesinados en un acto, hasta ahora, sin sentido, mientras regresaban a casa después de un día de carreras de caballos.
Este acto atroz ha dejado un profundo impacto en la comunidad.
A pesar de esta tragedia, el Centro Hípico Maturana permanece como un símbolo de la pasión y el espíritu comunitario que define a esta región.
Mientras la comunidad se une para honrar la memoria de aquellos que se perdieron, el legado de Marisela Barrón y su familia perdurará en cada carrera de caballos y evento familiar que se llevará a cabo en este lugar querido.
