Aprovecha las próximas vacaciones para que salgas a disfrutar en familia, las aguas termales en Jiménez son una excelente opción para un paseo diferente
Está próxima a llegar la primavera, y con ella los días de campo, momento perfecto para compartir en familia, cerca de Parral existen varios balnearios a dónde acudir a darse un buen chapuzón, pero, si lo que quieres es bañarte en las ricas aguas termales aquí te presentamos tres opciones cercanas a nuestro parralito encandor:
De agua clara, cristalina y cálida, así es el manantial de agua termal, el Ojo de Dolores, ubicado a veinte minutos de la cabecera municipal de Jiménez, lugar en el cual, tras una visita sientes que se te reinicia la vida.
Único en su tipo en la región sur del estado de Chihuahua; el Ojo de Dolores, ubicado en la porción centro-este del municipio de Jiménez, es un verdadero oasis en el árido desierto jimenense, en donde se hallan especies endémicas de peces, además de ser todo un centro turístico, donde la paz y armonía con la naturaleza reinan.
Durante la temporada de Semana Santa, este lugar es el predilecto para cientos de turistas provenientes de la región centro-sur del estado, quienes pueden disfrutar de las aguas termales, bajo la sombra de grandes álamos.
Situadas en el ejido División del Norte, en la región sur del municipio de Jiménez del estado de Chihuahua, se encuentran las aguas termales de los Remedios, al pie de la Sierra de Los Remedios y con vista de frente a la Sierra de Los Olanes, con paisajes secos del típico panorama árido del desierto.
La ruta comienza en la cabecera municipal de Jiménez, en dirección sur por la carretera federal 49, Jiménez-Torreón, hasta llegar al acceso a la ruta de Los Remedios, localizada como único punto de referencia a la altura de la comunidad de Escalón, derivado de que carece de señalización que identifique el sitio turístico.
Para una mejor experiencia, se puede hacer uso de las tecnologías digitales, buscando la ruta a través de Google Maps, Aguas Termales de los Remedios, aplicación que guiará a los visitantes hasta las termas de Los Remedios.
Al interior de una gruta artificial, cavada durante la última década del siglo 18 y principios del siglo 19, se encuentra el chorro de agua termal que recorre pequeñas albercas de diferentes figuras geométricas de una profundidad de entre 50 a 60 centímetros, en donde los visitantes pueden disfrutar del agua sentados o bien, recostados.
Ubicadas entre la sierra de Los Olanes y Los Remedios, en la porción sur del municipio de Jiménez, se hallan las aguas termales del Ojo del Caballo, un destino turístico constituido por aguas con propiedades curativas y el bello paisaje que lo rodea.
Conformado por tres piletas de diferentes profundidades y un manantial principal de donde emana el agua termal de más de 30 grados centígrados, es un lugar idóneo para la relajación, esparcimiento y convivencia familiar.
Para una estancia más cómoda, el sitio cuenta con abundantes árboles donde guarecerse del calor y sol, asadores, vestidores, baños y una vista del cielo y parte del panorama del Bolsón de Mapimí únicos.
Por las noches, para los amantes del cosmos, la ausencia de luminarias ofrece un cielo libre de contaminación lumínica, ideal para la observación de cuerpos celestes y la práctica de la astrofotografía.
Con el paso de los años y conforme más gente descubre las aguas termales del Ojo del Caballo, se han ganado un lugar en el corazón de los visitantes, por sus propiedades curativas y su temperatura cálida y agradable, que oscila entre los 30 y los 38 grados Celsius.
El acceso se encuentra a una hora con treinta minutos de la cabecera municipal de Jiménez, tomando la carretera Federal 49 Jiménez-Torreón, hasta llegar a la desviación ubicada a la altura del kilómetro 164, para después ingresar a un camino de terracería.
Para esta temporada de vacaciones de Semana Santa, si planeas visitar las aguas termales del Ojo del Caballo en Jiménez, Chihuahua, es por excelencia uno de los lugares más atractivos y rústicos para pasar un momento agradable en familia, rodeado de las sierras de Los Olanes y los Remedios y el paisaje del gran desierto chihuahuense.
Está próxima a llegar la primavera, y con ella los días de campo, momento perfecto para compartir en familia, cerca de Parral existen varios balnearios a dónde acudir a darse un buen chapuzón, pero, si lo que quieres es bañarte en las ricas aguas termales aquí te presentamos tres opciones cercanas a nuestro parralito encandor:
De agua clara, cristalina y cálida, así es el manantial de agua termal, el Ojo de Dolores, ubicado a veinte minutos de la cabecera municipal de Jiménez, lugar en el cual, tras una visita sientes que se te reinicia la vida.
Único en su tipo en la región sur del estado de Chihuahua; el Ojo de Dolores, ubicado en la porción centro-este del municipio de Jiménez, es un verdadero oasis en el árido desierto jimenense, en donde se hallan especies endémicas de peces, además de ser todo un centro turístico, donde la paz y armonía con la naturaleza reinan.
Durante la temporada de Semana Santa, este lugar es el predilecto para cientos de turistas provenientes de la región centro-sur del estado, quienes pueden disfrutar de las aguas termales, bajo la sombra de grandes álamos.
Situadas en el ejido División del Norte, en la región sur del municipio de Jiménez del estado de Chihuahua, se encuentran las aguas termales de los Remedios, al pie de la Sierra de Los Remedios y con vista de frente a la Sierra de Los Olanes, con paisajes secos del típico panorama árido del desierto.
La ruta comienza en la cabecera municipal de Jiménez, en dirección sur por la carretera federal 49, Jiménez-Torreón, hasta llegar al acceso a la ruta de Los Remedios, localizada como único punto de referencia a la altura de la comunidad de Escalón, derivado de que carece de señalización que identifique el sitio turístico.
Para una mejor experiencia, se puede hacer uso de las tecnologías digitales, buscando la ruta a través de Google Maps, Aguas Termales de los Remedios, aplicación que guiará a los visitantes hasta las termas de Los Remedios.
Al interior de una gruta artificial, cavada durante la última década del siglo 18 y principios del siglo 19, se encuentra el chorro de agua termal que recorre pequeñas albercas de diferentes figuras geométricas de una profundidad de entre 50 a 60 centímetros, en donde los visitantes pueden disfrutar del agua sentados o bien, recostados.
Ubicadas entre la sierra de Los Olanes y Los Remedios, en la porción sur del municipio de Jiménez, se hallan las aguas termales del Ojo del Caballo, un destino turístico constituido por aguas con propiedades curativas y el bello paisaje que lo rodea.
Conformado por tres piletas de diferentes profundidades y un manantial principal de donde emana el agua termal de más de 30 grados centígrados, es un lugar idóneo para la relajación, esparcimiento y convivencia familiar.
Para una estancia más cómoda, el sitio cuenta con abundantes árboles donde guarecerse del calor y sol, asadores, vestidores, baños y una vista del cielo y parte del panorama del Bolsón de Mapimí únicos.
Por las noches, para los amantes del cosmos, la ausencia de luminarias ofrece un cielo libre de contaminación lumínica, ideal para la observación de cuerpos celestes y la práctica de la astrofotografía.
Con el paso de los años y conforme más gente descubre las aguas termales del Ojo del Caballo, se han ganado un lugar en el corazón de los visitantes, por sus propiedades curativas y su temperatura cálida y agradable, que oscila entre los 30 y los 38 grados Celsius.
El acceso se encuentra a una hora con treinta minutos de la cabecera municipal de Jiménez, tomando la carretera Federal 49 Jiménez-Torreón, hasta llegar a la desviación ubicada a la altura del kilómetro 164, para después ingresar a un camino de terracería.
Para esta temporada de vacaciones de Semana Santa, si planeas visitar las aguas termales del Ojo del Caballo en Jiménez, Chihuahua, es por excelencia uno de los lugares más atractivos y rústicos para pasar un momento agradable en familia, rodeado de las sierras de Los Olanes y los Remedios y el paisaje del gran desierto chihuahuense.
