El párroco afirmó que las comunidades esperan la respuesta de las autoridades, pues la violencia y las amenazas en esas localidades son recurrentes
El sacerdote Javier “Pato” Ávila, dio a conocer que hasta el momento no se tienen noticias de los jóvenes desaparecidos en la ranchería Puerto Ánimas en la comunidad de Alisos, quienes pudieron ser privados de su libertad con fines de reclutamiento para la delincuencia.
Explicó que las comunidades de Baborigame, se encuentran a la espera de recibir una respuesta por parte de las autoridades federales y estatales, a las que se les dirigió un documento en donde se explica la situación de inseguridad que se vive, por parte de la delincuencia organizada.
Destacó que hasta el momento los jóvenes presuntamente privados de la libertad en dos hechos distintos en las comunidades de Baborigame, siguen sin aparecer y sus familiares no tienen información sobre su paradero.
Javier Ávila reiteró que no es algo nuevo el hecho de que se pida apoyo a las autoridades estatales y federales, pues la violencia y las amenazas en esas localidades, son recurrentes.
En este sentido, señaló que uno de los problemas radica en que cuando se denuncian amenazas y agresiones por parte de la delincuencia organizada, las autoridades responden con un operativo, el cual genera que los delincuentes se escondan por un corto tiempo y posteriormente regresan a seguir amenazando y hasta con venganzas sobre los operativos.
“Nosotros lo que estamos solicitando es la presencia permanente de la autoridad, hay regiones en las que urge que estén permanentemente las corporaciones federales y estatales, para que detengan y procesen a los generadores de violencia”, explicó.
El clérigo mencionó que no se sabe el móvil de la privación ilegal de la libertad de los jovencitos en la comunidad de Baborigame, sin embargo, dijo que existe la presunción de que se trata de un reclutamiento obligado.
Cabe mencionar que en una carta dirigida a las autoridades estatales y federales, derechohumanistas, religiosos y habitantes de Baborigame, denunciaron el secuestro de Emanuel Ángel Guevara Ayala, de 15 años y Jesús Manuel Ayala Almanza de 13 años, posteriormente otros dos jovencitos desaparecieron en otra comunidad cercana en el municipio de Guadalupe y Calvo.
El sacerdote Javier “Pato” Ávila, dio a conocer que hasta el momento no se tienen noticias de los jóvenes desaparecidos en la ranchería Puerto Ánimas en la comunidad de Alisos, quienes pudieron ser privados de su libertad con fines de reclutamiento para la delincuencia.
Explicó que las comunidades de Baborigame, se encuentran a la espera de recibir una respuesta por parte de las autoridades federales y estatales, a las que se les dirigió un documento en donde se explica la situación de inseguridad que se vive, por parte de la delincuencia organizada.
Destacó que hasta el momento los jóvenes presuntamente privados de la libertad en dos hechos distintos en las comunidades de Baborigame, siguen sin aparecer y sus familiares no tienen información sobre su paradero.
Javier Ávila reiteró que no es algo nuevo el hecho de que se pida apoyo a las autoridades estatales y federales, pues la violencia y las amenazas en esas localidades, son recurrentes.
En este sentido, señaló que uno de los problemas radica en que cuando se denuncian amenazas y agresiones por parte de la delincuencia organizada, las autoridades responden con un operativo, el cual genera que los delincuentes se escondan por un corto tiempo y posteriormente regresan a seguir amenazando y hasta con venganzas sobre los operativos.
“Nosotros lo que estamos solicitando es la presencia permanente de la autoridad, hay regiones en las que urge que estén permanentemente las corporaciones federales y estatales, para que detengan y procesen a los generadores de violencia”, explicó.
El clérigo mencionó que no se sabe el móvil de la privación ilegal de la libertad de los jovencitos en la comunidad de Baborigame, sin embargo, dijo que existe la presunción de que se trata de un reclutamiento obligado.
Cabe mencionar que en una carta dirigida a las autoridades estatales y federales, derechohumanistas, religiosos y habitantes de Baborigame, denunciaron el secuestro de Emanuel Ángel Guevara Ayala, de 15 años y Jesús Manuel Ayala Almanza de 13 años, posteriormente otros dos jovencitos desaparecieron en otra comunidad cercana en el municipio de Guadalupe y Calvo.
