Cuando la basura nos alcance

Post Content

Eduardo Fernández Ponce

“Seguir considerando a la basura doméstica

como tiradero, sin pensar que al reciclarla es

dinero para el erario y mejora ambiental, se

corre el riesgo de contaminar toda la ciudad.

Rolf Stranger / alcalde Oslo 1956 -59

Parecerá ciencia ficción, pero de continuar así en un siglo casas y edificios tendrán que construirse con bloques no de ladrillo sino de basura comprimida con todos los agentes contaminantes que los seres humanos deberán de resistir por medio de vacunas.
La ciudad de Chihuahua no será la excepción.
De no reciclarse la basura plástica se tendrán millones de toneladas de estos productos que tardan en degradarse 150 años.
El vidrio 40 siglos, un chicle cinco años; pero una colilla de cigarro con la lluvia contamina 50 litros.
Contrario a la naturaleza y los animales que todo lo que desechan inclusive su existencia al concluir se reintegran a la naturaleza misma en un ciclo perfecto; contrario a los seres humanos que todo lo que producen con su inteligencia al extinguirse es un bumerán para la humanidad.

Cuando las Naciones Unidas declararon el decenio 2005-2014 como la Década de la Educación para el Desarrollo Sostenible (EDS), encargando a la UNESCO su puesta en práctica.
Muchos países desarrollados incorporaron en los sistemas educativos el rol de enseñanza y práctica del cuidado a la ecología, de ahí que los programas de México (SEP y Semarnat) si bien fueron distinguidos por su contenido, su aplicación prácticamente fue nula.
Los protocolos de enseñanza quedaron en simples mensajes televisivos.
El problema es que las cosas se dicen, pero no se hacen.
O más bien, no se hacen de la forma adecuada.

Actualmente ciudades noruegas están comprando basura a España, Inglaterra, Francia, etc.
para reciclarla y convertirla entre otras cosas en energía eléctrica para la industria y alumbrado doméstico y urbano.
Inclusive están planeando comprar basura a Norteamérica y llevarla en buques cisterna.
Los desechos orgánicos tienen de inmediato un tratamiento convirtiéndose en fertilizantes orgánicos que sirven para enriquecer los suelos para las actividades agrícolas.
Noruega pese a ser un país con grandes extensiones boscosas en terrenos pedregosos sólo el 3% de sus suelos son aptos para la agricultura.
En 2019 Oslo fue declarada la ciudad verde de Europa.

El conflicto legal del Municipio de Chihuahua con particulares sobre la instalación de un nuevo “tiradero” (que hasta el término tiene despectivo, de ahí, que la basura no tiene importancia), es urgente resolver para beneficio de la comunidad.
Sin embargo debe reflexionarse y analizar con expertos locales la factibilidad de fomentar pequeñas empresas para el reciclamiento y utilidad de la basura en bienes de nueva utilidad urbana, así como los procesos de educación en población.

En el 2020 se anunció que Chihuahua capital obtuvo el primer lugar en Índice de Sustentabilidad Ambiental Índice de 20 Ciudades Prósperas de México, de acuerdo a la ONU-Hábitat.
Independientemente de los criterios asumidos para este reconocimiento, las ciudades mexicanas traen un rezago en lo relativo a la selección de los desechos precisamente, porque no se estimula entre los ciudadanos el reciclaje, por ejemplo de latas de aluminio que con máquinas trituradoras instaladas en supermercados sería el propio consumidor que descontara su utilidad en dinero en la propia operación comercial.
No demos tregua o de lo contrario la basura nos alcanzará contaminando acuíferos, medio ambiente y una sociedad incomprensible.

Eduardo Fernández Ponce

“Seguir considerando a la basura doméstica

como tiradero, sin pensar que al reciclarla es

dinero para el erario y mejora ambiental, se

corre el riesgo de contaminar toda la ciudad.

Rolf Stranger / alcalde Oslo 1956 -59

Parecerá ciencia ficción, pero de continuar así en un siglo casas y edificios tendrán que construirse con bloques no de ladrillo sino de basura comprimida con todos los agentes contaminantes que los seres humanos deberán de resistir por medio de vacunas.
La ciudad de Chihuahua no será la excepción.
De no reciclarse la basura plástica se tendrán millones de toneladas de estos productos que tardan en degradarse 150 años.
El vidrio 40 siglos, un chicle cinco años; pero una colilla de cigarro con la lluvia contamina 50 litros.
Contrario a la naturaleza y los animales que todo lo que desechan inclusive su existencia al concluir se reintegran a la naturaleza misma en un ciclo perfecto; contrario a los seres humanos que todo lo que producen con su inteligencia al extinguirse es un bumerán para la humanidad.

Cuando las Naciones Unidas declararon el decenio 2005-2014 como la Década de la Educación para el Desarrollo Sostenible (EDS), encargando a la UNESCO su puesta en práctica.
Muchos países desarrollados incorporaron en los sistemas educativos el rol de enseñanza y práctica del cuidado a la ecología, de ahí que los programas de México (SEP y Semarnat) si bien fueron distinguidos por su contenido, su aplicación prácticamente fue nula.
Los protocolos de enseñanza quedaron en simples mensajes televisivos.
El problema es que las cosas se dicen, pero no se hacen.
O más bien, no se hacen de la forma adecuada.

Actualmente ciudades noruegas están comprando basura a España, Inglaterra, Francia, etc.
para reciclarla y convertirla entre otras cosas en energía eléctrica para la industria y alumbrado doméstico y urbano.
Inclusive están planeando comprar basura a Norteamérica y llevarla en buques cisterna.
Los desechos orgánicos tienen de inmediato un tratamiento convirtiéndose en fertilizantes orgánicos que sirven para enriquecer los suelos para las actividades agrícolas.
Noruega pese a ser un país con grandes extensiones boscosas en terrenos pedregosos sólo el 3% de sus suelos son aptos para la agricultura.
En 2019 Oslo fue declarada la ciudad verde de Europa.

El conflicto legal del Municipio de Chihuahua con particulares sobre la instalación de un nuevo “tiradero” (que hasta el término tiene despectivo, de ahí, que la basura no tiene importancia), es urgente resolver para beneficio de la comunidad.
Sin embargo debe reflexionarse y analizar con expertos locales la factibilidad de fomentar pequeñas empresas para el reciclamiento y utilidad de la basura en bienes de nueva utilidad urbana, así como los procesos de educación en población.

En el 2020 se anunció que Chihuahua capital obtuvo el primer lugar en Índice de Sustentabilidad Ambiental Índice de 20 Ciudades Prósperas de México, de acuerdo a la ONU-Hábitat.
Independientemente de los criterios asumidos para este reconocimiento, las ciudades mexicanas traen un rezago en lo relativo a la selección de los desechos precisamente, porque no se estimula entre los ciudadanos el reciclaje, por ejemplo de latas de aluminio que con máquinas trituradoras instaladas en supermercados sería el propio consumidor que descontara su utilidad en dinero en la propia operación comercial.
No demos tregua o de lo contrario la basura nos alcanzará contaminando acuíferos, medio ambiente y una sociedad incomprensible.

Osvaldo

Cartones

Entrada siguiente

Invierten 10 millones de pesos para rehabilitar cauces de ríos

jue Jul 6 , 2023
El dinero será puesto por la Comisión Nacional del Agua, mientras que las asociaciones civiles de usuarios de riego apoyarán con la maquinaria

Puede que te guste

Generated by Feedzy