Cristóbal Colón: el tirano que se negaba a bautizar indígenas para esclavizarlos

Con la llegada de Cristóbal Colón a América, los indígenas fueron despojados de sus tierras, su cultura y sus familias

Sin embargo, es muy importante recordar, que durante la llegada de Colón y por ende, de los españoles, los indígenas sufrieron demasiado pues los despojaron de sus tierras, de sus costumbres, de sus familias, de sus alimentos y de todo lo que tenían, por lo que en los últimos años, para darle honor a nuestros ancestros, esta fecha también es conocida (y reconocida por la CNDH) como el “Día de la Resistencia Indígena".

Al igual que México, Estados Unidos cambió el “Día de Colón” por el Día de los Pueblos Indígenas, para darle más valor a los nativos américados y no poner en alto en nombre de Colón quien en conjunto con sus hombres le causaron a los pueblos originarios.

Si bien es cierto que la llegada de Colón a América tuvo un gran impacto histórico debido a la era de la exploración, el comercio y la colonización de los europeos, también es cierto que él no descubrió el continente.

De hecho, cuando él llegó ya había cientos de indígenas viviendo ahí, que habían desarrollado su propia lengua, costumbres y tradiciones desde cientos de años atrás, y de hecho también los vikingos habían estado en América desde casi 500 años antes de que Colón lo hiciera.

Durante los viajes que realizó Colón en el caribe y las costas de Centroamérica y Sudamérica, encontró pueblos indígenas a quienes comenzó a llamarlos “indios”, estas personas posteriormente fueron esclavizadas.

Colón “recolectaba” personas indígenas y comerciaba con ellos, los enviaba a España para venderlos como esclavos y él recibía un dinero a cambio; durante los viajes en barco entre América y Europa, muchas personas morían.

Los españoles construyeron en América tantas fortalezas como les fue posible, por lo que los indígenas se percataron de que probablemente no se irían jamás.

Luego de tanta explotación laboral y de los recursos, todo se fue agotando poco a poco y cuando empezaron a faltar, Colón decretó que cualquier hombre originario de América que tuviera más de 14 años de edad tenía que pagarle cierta cantidad de oro cada tres meses si es que quería vivir.

Si los indígenas no le entregaban el oro se les cortaba una o las dos manos mientras estaban vivos y los dejaban desangrarse hasta morir.

Colón y sus hermanos impidieron a toda costa que los indígenas pudieran ser bautizados, porque si realizaban este acto religioso ya no podía venderlos como esclavos, lo que le generaba un gran conflicto de interés.

Cristóbal Colón era sumamente religioso, pero lo religioso no le quitaba lo malvado ni a él ni a sus hermanos que de igual forma fueron un tiranos, según palabras de sus conocidos más allegados.

Cuando alguna persona decidía ponerse en contra de Colón o cuando grupos de indígenas decidían rebelarse, él les aplicaba castigos horribles dignos de una película de terror.

Mientras Cristóbal Colón se encontraba en República Dominicana mató a cientos de nativos que se rebelaron, y posteriormente creó un “desfile” donde mostraba los cuerpos de los fallecidos, generando así terror entre los pobladores, quienes temían intentar rebelarse de nuevo, pues era una advertencia de que si lo hacían terminarían muertos.

Asimismo, durante su estadía en el lugar, se subastaron cientos de personas como si fuesen un objeto y se ejecutaron muchas otras en público.
Igualmente, si alguien hacía o decía algo que no era correcto para ellos, Colón y sus hermanos les cortaban las orejas, la nariz, la lengua, los dedos, entre otras cosas, además de que los mostraban en público y los humillaban.

Con la llegada de los españoles, vinieron también nuevas bacterias y virus, contra los que el sistema inmunológico de los indígenas no podría pelear tan fácilmente, pues eran desconocidas para él.

Entre las enfermedades que los españoles trajeron a América están la gripe, la viruela y el sarampión, que se llevaron la vida de casi el 90% de los nativos.
Pues se cree que en 1492 había 250 mil indígenas y para finales de 1517 quedaban tan sólo 14 mil, es decir, murieron casi 236 mil personas.

Éstas enfermedades en América generaron más muertes que la peste negra en Europa durante la época medieval, según información de la Fundación de Investigación Médica de Oklahoma (OMRF por sus siglas en inglés)

Pese a que el Día de Cristóbal Colón o el Día de La Raza se celebraba en varios lugares de América, actualmente muchos países han decidido nombrar esa fecha como el Día de la Resistencia Indígena y de igual forma, han retirado las estatuas o monumento que había en nombre de Colón.

Gracias al avance en leyes y derechos humanos, muchos indígenas luchan por el reconocimiento de sus identidades y defienden todo lo que por ley les pertenece, además de que son ellos quienes nos dan la oportunidad de escuchar la verdadera historia contada por parte de las víctimas y no de los victimarios como constantemente ocurre.

Debido a ello, el 12 de octubre ha pasado a ser el Día de la Raza y con el reconocimiento de la CNDH se ha convertido en el Día de la Resistencia indígena o Día de Los Pueblos Originarios, intentando así mostrándole mayor valor a nuestros ancestros y a su gran lucha por preservar la cultura.

Sin embargo, es muy importante recordar, que durante la llegada de Colón y por ende, de los españoles, los indígenas sufrieron demasiado pues los despojaron de sus tierras, de sus costumbres, de sus familias, de sus alimentos y de todo lo que tenían, por lo que en los últimos años, para darle honor a nuestros ancestros, esta fecha también es conocida (y reconocida por la CNDH) como el “Día de la Resistencia Indígena".

Al igual que México, Estados Unidos cambió el “Día de Colón” por el Día de los Pueblos Indígenas, para darle más valor a los nativos américados y no poner en alto en nombre de Colón quien en conjunto con sus hombres le causaron a los pueblos originarios.

Si bien es cierto que la llegada de Colón a América tuvo un gran impacto histórico debido a la era de la exploración, el comercio y la colonización de los europeos, también es cierto que él no descubrió el continente.

De hecho, cuando él llegó ya había cientos de indígenas viviendo ahí, que habían desarrollado su propia lengua, costumbres y tradiciones desde cientos de años atrás, y de hecho también los vikingos habían estado en América desde casi 500 años antes de que Colón lo hiciera.

Durante los viajes que realizó Colón en el caribe y las costas de Centroamérica y Sudamérica, encontró pueblos indígenas a quienes comenzó a llamarlos “indios”, estas personas posteriormente fueron esclavizadas.

Colón “recolectaba” personas indígenas y comerciaba con ellos, los enviaba a España para venderlos como esclavos y él recibía un dinero a cambio; durante los viajes en barco entre América y Europa, muchas personas morían.

Los españoles construyeron en América tantas fortalezas como les fue posible, por lo que los indígenas se percataron de que probablemente no se irían jamás.

Luego de tanta explotación laboral y de los recursos, todo se fue agotando poco a poco y cuando empezaron a faltar, Colón decretó que cualquier hombre originario de América que tuviera más de 14 años de edad tenía que pagarle cierta cantidad de oro cada tres meses si es que quería vivir.

Si los indígenas no le entregaban el oro se les cortaba una o las dos manos mientras estaban vivos y los dejaban desangrarse hasta morir.

Colón y sus hermanos impidieron a toda costa que los indígenas pudieran ser bautizados, porque si realizaban este acto religioso ya no podía venderlos como esclavos, lo que le generaba un gran conflicto de interés.

Cristóbal Colón era sumamente religioso, pero lo religioso no le quitaba lo malvado ni a él ni a sus hermanos que de igual forma fueron un tiranos, según palabras de sus conocidos más allegados.

Cuando alguna persona decidía ponerse en contra de Colón o cuando grupos de indígenas decidían rebelarse, él les aplicaba castigos horribles dignos de una película de terror.

Mientras Cristóbal Colón se encontraba en República Dominicana mató a cientos de nativos que se rebelaron, y posteriormente creó un “desfile” donde mostraba los cuerpos de los fallecidos, generando así terror entre los pobladores, quienes temían intentar rebelarse de nuevo, pues era una advertencia de que si lo hacían terminarían muertos.

Asimismo, durante su estadía en el lugar, se subastaron cientos de personas como si fuesen un objeto y se ejecutaron muchas otras en público.
Igualmente, si alguien hacía o decía algo que no era correcto para ellos, Colón y sus hermanos les cortaban las orejas, la nariz, la lengua, los dedos, entre otras cosas, además de que los mostraban en público y los humillaban.

Con la llegada de los españoles, vinieron también nuevas bacterias y virus, contra los que el sistema inmunológico de los indígenas no podría pelear tan fácilmente, pues eran desconocidas para él.

Entre las enfermedades que los españoles trajeron a América están la gripe, la viruela y el sarampión, que se llevaron la vida de casi el 90% de los nativos.
Pues se cree que en 1492 había 250 mil indígenas y para finales de 1517 quedaban tan sólo 14 mil, es decir, murieron casi 236 mil personas.

Éstas enfermedades en América generaron más muertes que la peste negra en Europa durante la época medieval, según información de la Fundación de Investigación Médica de Oklahoma (OMRF por sus siglas en inglés)

Pese a que el Día de Cristóbal Colón o el Día de La Raza se celebraba en varios lugares de América, actualmente muchos países han decidido nombrar esa fecha como el Día de la Resistencia Indígena y de igual forma, han retirado las estatuas o monumento que había en nombre de Colón.

Gracias al avance en leyes y derechos humanos, muchos indígenas luchan por el reconocimiento de sus identidades y defienden todo lo que por ley les pertenece, además de que son ellos quienes nos dan la oportunidad de escuchar la verdadera historia contada por parte de las víctimas y no de los victimarios como constantemente ocurre.

Debido a ello, el 12 de octubre ha pasado a ser el Día de la Raza y con el reconocimiento de la CNDH se ha convertido en el Día de la Resistencia indígena o Día de Los Pueblos Originarios, intentando así mostrándole mayor valor a nuestros ancestros y a su gran lucha por preservar la cultura.

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