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Dice el dicho que en México no podemos ver progresar a alguien más que no seamos nosotros, y desgraciadamente aplica perfecto aquella historia que habla de los cangrejos dentro de una cubeta, donde en lugar de apoyarse para salir de la misma, jalan al que está logrando escapar.
Bueno, pues esa fábula cae perfecto en lo que ha acontecido en días anteriores en nuestra ciudad de Chihuahua, específicamente en el caso de la oposición y generación de amparos contra el proyecto de Relleno Sanitario Mapula.
Un proyecto de este calado, un proyecto que viene a resolver el problema del procesamiento y acumulación de la basura de la ciudad para las siguientes generaciones, con una proyección de utilización para los próximos 70 años.
Un proyecto que se tiene trabajando desde antes de que comenzara la actual administración municipal del alcalde Marco Bonilla, y, en el cual se han involucrado en el desarrollo del proyecto instituciones académicas universitarias como la Universidad Autónoma de Chihuahua para garantizar su factibilidad y viabilidad, en cuanto a los estudios ambientales (geológicos, hidrológicos, geotécnicos, de generación de residuos sólidos, etc) para dicho proyecto.
Hay que considerar que el actual Relleno Sanitario está a punto de llegar a su límite y por lo tanto de su vida útil, el Relleno Sanitario actual cuenta ya con 30 años de antigüedad.
Ahora bien, queda claro que Morena en Chihuahua, y en todo el territorio nacional no sólo no está de acuerdo con los proyectos de infraestructura que mejoran la calidad de vida de las personas.
Y es en esto precisamente donde se requiere hacer visible el contraste entre dos visiones completamente opuestas de cómo el gobierno debería atender la necesidad de sus ciudadanos dentro de la sociedad.
Por un lado, los gobiernos humanistas de Acción Nacional que buscan dignificar la vida de los ciudadanos a través de acciones como llevar drenaje y agua potable (la inversión en este rubro este año es de más de $200 millones en la ciudad de Chihuahua y más de $1,300 millones en todo el estado) a colonias de la ciudad que se han encontrado en el rezago en las últimas décadas.
Inversión que no es de relumbrón pero que sin embargo le cambia la vida a las personas y familias de las colonias que no cuentan con dichos servicios.
Por el otro lado, Morena, buscando obstaculizar los proyectos de infraestructura como el Relleno Sanitario (estuvieron promoviendo los amparos en contra de dicho proyecto), con una visión asistencialista que más bien pareciera una visión clientelista, al parecer le apuestan a que no exista desarrollo de las bases de la sociedad, justo para mantenerlos clientelarmente dependiente de los apoyos que otorgan (raquíticos) que no alcanzan para lo más básico, como un servicio de salud digno por ejemplo, ante el desmantelamiento de programas y servicios como el del Seguro Universal por el Insabi, que por cierto, ya desaparecieron también.
Además, dejar en esta entrega el testimonio de cómo están haciendo entrega de los apoyos, sobre todo a adultos mayores en condiciones poco dignas, haciendo esperar a los beneficiarios hasta tres horas haciendo fila debajo del sol, sin instalaciones dignas donde las personas puedan esperar sus apoyos.
El elector será quien tenga la última palabra para decidir qué visión de gobierno y sociedad prefiere.
Generalmente en el norte nos gusta generar desarrollo, más allá de simplemente esperar dádivas.
Al tiempo.
Correo: argaray123@gmail.
com
Tw: armandogarayr
Dice el dicho que en México no podemos ver progresar a alguien más que no seamos nosotros, y desgraciadamente aplica perfecto aquella historia que habla de los cangrejos dentro de una cubeta, donde en lugar de apoyarse para salir de la misma, jalan al que está logrando escapar.
Bueno, pues esa fábula cae perfecto en lo que ha acontecido en días anteriores en nuestra ciudad de Chihuahua, específicamente en el caso de la oposición y generación de amparos contra el proyecto de Relleno Sanitario Mapula.
Un proyecto de este calado, un proyecto que viene a resolver el problema del procesamiento y acumulación de la basura de la ciudad para las siguientes generaciones, con una proyección de utilización para los próximos 70 años.
Un proyecto que se tiene trabajando desde antes de que comenzara la actual administración municipal del alcalde Marco Bonilla, y, en el cual se han involucrado en el desarrollo del proyecto instituciones académicas universitarias como la Universidad Autónoma de Chihuahua para garantizar su factibilidad y viabilidad, en cuanto a los estudios ambientales (geológicos, hidrológicos, geotécnicos, de generación de residuos sólidos, etc) para dicho proyecto.
Hay que considerar que el actual Relleno Sanitario está a punto de llegar a su límite y por lo tanto de su vida útil, el Relleno Sanitario actual cuenta ya con 30 años de antigüedad.
Ahora bien, queda claro que Morena en Chihuahua, y en todo el territorio nacional no sólo no está de acuerdo con los proyectos de infraestructura que mejoran la calidad de vida de las personas.
Y es en esto precisamente donde se requiere hacer visible el contraste entre dos visiones completamente opuestas de cómo el gobierno debería atender la necesidad de sus ciudadanos dentro de la sociedad.
Por un lado, los gobiernos humanistas de Acción Nacional que buscan dignificar la vida de los ciudadanos a través de acciones como llevar drenaje y agua potable (la inversión en este rubro este año es de más de $200 millones en la ciudad de Chihuahua y más de $1,300 millones en todo el estado) a colonias de la ciudad que se han encontrado en el rezago en las últimas décadas.
Inversión que no es de relumbrón pero que sin embargo le cambia la vida a las personas y familias de las colonias que no cuentan con dichos servicios.
Por el otro lado, Morena, buscando obstaculizar los proyectos de infraestructura como el Relleno Sanitario (estuvieron promoviendo los amparos en contra de dicho proyecto), con una visión asistencialista que más bien pareciera una visión clientelista, al parecer le apuestan a que no exista desarrollo de las bases de la sociedad, justo para mantenerlos clientelarmente dependiente de los apoyos que otorgan (raquíticos) que no alcanzan para lo más básico, como un servicio de salud digno por ejemplo, ante el desmantelamiento de programas y servicios como el del Seguro Universal por el Insabi, que por cierto, ya desaparecieron también.
Además, dejar en esta entrega el testimonio de cómo están haciendo entrega de los apoyos, sobre todo a adultos mayores en condiciones poco dignas, haciendo esperar a los beneficiarios hasta tres horas haciendo fila debajo del sol, sin instalaciones dignas donde las personas puedan esperar sus apoyos.
El elector será quien tenga la última palabra para decidir qué visión de gobierno y sociedad prefiere.
Generalmente en el norte nos gusta generar desarrollo, más allá de simplemente esperar dádivas.
Al tiempo.
Correo: argaray123@gmail.
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