Los altos mandos de la Policía y del Ejército son infaltables en los actos públicos del régimen sandinista. También el Canciller y los titulares de los poderes Legislativo y Judicial. Militantes con larga trayectoria y obediencia absoluta al régimen, fueron acusados recientemente por la ONU de cometer crímenes de lesa humanidad junto a Ortega y su esposa Rosario Murillo. Texto publicado originalmente por CONNECTAS.
A la mesa con Daniel Ortega: los leales que se sientan junto a él
